jueves, 11 de noviembre de 2010

Trabajo infantil

Se supone que la infancia es para jugar, para descubrir el mundo, para aprender. Desafortunadamente no es así y en todos los lugares del mundo, incluso nuestro país, el bienestar de los niños no vale nada, desde los bebés de la guardería ABC, los niños víctimas de abuso por parte de Maciel o las niñas indígenas que son vendidas por sus propios padres; también existe otro tipo de maltrato, el de los padres que no saben educar a sus hijos y los dejan crecer con una imagen distorsionada del mundo; pero esos no son temas que trataremos en esta ocasión.

Esta vez quiero hablar del trabajo infantil en otras partes del mundo; recuerdo, cuando la guerra Iran-Iraq, que los niños eran enviados a detectar las minas antipersonales y se les daba una llavecita, "para abrir las puertas del cielo"; las guerrillas africanas nutren sus filas de niños esclavos, criados para asesinar sean del sexo que sean, las niñas, además, tienen funciones sexuales.

En este post, por cierto no apto para los débiles de corazón, nos ofrecen un testimonio fotográfico de niños que trabajan en condiciones infrahumanas, tres niños, Farras de 10 años y sus hermanos de 2 y 3, trabajan en una fábrica de ladrillos en Pakistán, haciendo la mezcla, moldeándolos y acarreandolos más de 12 horas diarias, los más pequeños, son los encargados de voltearlos para que se sequen. Otra historia más, Hajira, de 8 años, machaca pilas con ladrillos que vienen de Pakistán para extraer la varilla de carbono de las mismas para limpiarla y recibir una cantidad miserable por cada 1000, con lo que ella y su madre ganan en ello, pueden comer cada 2 días; las infecciones por polvo negro de carbón son comunes y sangran de la naríz casi todo el tiempo; esto en Bangladesh. En Camboya, niños de 7 a 11 años buscan entre las montañas de basura humeante, descalzos, protegiéndose del humo tóxico en busca de metales, pilas (que son vendidas a Bangladesh) y cualquier cosa que se pueda vender; la toxicidad de su lugar de trabajo se refleja en la alta incidencia de cáncer entre estos niños. Los niños trabajando en basureros son muy comunes en nuestro país, sólo hace falta ir a cualquier tiradero de basura. Finalmente, nos vamos a Colombia, en donde para extraer las famosas esmeraldas colombianas, los padres no tienen empacho en usar a sus hijos para remover la tierra o incluso para meterlos en túneles estrechos a picar piedra. de estos dos últimos casos, los niños dependen de lo que encuentran para poder comer.

El trabajo infantil es una infamia que nos muestra que el ser humano siempre abusará del más débil y que nuestra cómoda vida ha sido pagada por el trabajo de alguien más, como dice este video de RadioHead "Algunas cosas cuestan más de lo que crees".

2 comentarios:

Hluot Firthunands dijo...

Bueno, solo queda decir que los niños están en Pakistán, Camboya y Colombia pero, por ejemplo, las esmeraldas de Colombia no se quedan en el pueblito de Carlos ¿verdad?

Creo que esas piedritas estan en los cuellos de algunas muy benevolentes damas de la alta sociedad gringa y europea.

Mi punto es que si la glovalización existe, los paices ricos tienen responsabilidad en esto. Si el niño está en Camboya, el explotador puede estar en Francia.

Y sí, los padres deberian de tener solo hijos que puedan mantener y protejer, pero eso es un sueño bastante utópico.

Kishiria dijo...

Mientras haya consumidores, habrá explotadores. y no se trata solo de las damas de alta sociedad, también de los que usamos baterías, celulares y otros artefactos que consideramos actualmente indispensables

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