¿Arte o pornografía?

Seamos honestos, muchas de las piezas pornográficas más enfermas que he visto en mi vida (y yo hacía artículos para una revista para adultos) viene de Japón, entre el anime y el AV uno se encuentra cada cosa que haría sonrojar a Sade y a Xaviera Hollander

Irónicamente, según las leyes japonesas de 1943 está prohibida la descripción detallada de genitales adultos (notan el loophole?) una ley que aunque se ha derogado, aún sigue aplicándose en materia administrativa y sigue siendo la norma en el terreno editorial

Hace un par de semanas, una artísta plástica japonesa Megumi Igarashi, mejor conocida como Rokudenashiko fue arrestada bajo cargos de obscenidad, por tomar un selfie de su vagina

Megumi tiene como tema de todas sus obras su vagina, este proyecto inició en la juventud de la ahora artista de 42, cuando se preguntaba si tal parte de su cuerpo era normal o no, lo que la llevó a sacar un molde de sus partes privadas

A partir de entonces ella tomó como causa el erradicar el tabú sobre tal parte del cuerpo y su más reciente proyecto era crear un kayak con la forma de sus genitales por medio de una impresora 3D, financiándolo por medio de crowdfunding, a cambio de sus donaciones sus seguidores podrían recibir material de los scanners 3D

El problema es que para las autoridades tales scans son material obsceno o pornografía lo que llevó al arresto de la artista, quien, en caso de que se le apliquen los cargos enfrentaría 26 meses de prisión y una cuantiosa multa

Los fans de la artista han protestado y han pedido que se revise el caso de la libertad de expresión de Megumi, hasta el momento aunque está libre bajo fianza, queda al pendiente si se iniciará el proveso o no