Estaba en el tianguis junto a un puesto de accesorios para perros y sostenía un cachorro de Golden Retriever, con la misma mano con la que sostenía su cigarro. se tratabam sin lugar a dudas de un vendeperros, que realiza su labor en la vía pública (algo que es sancionado por las autoridades). La gente se detenía y le preguntaba, 2500 el cachorro, otros, si tenía animales para cruza y a cuanto.
Mucha gente considera a los perros (y a los gatos) como un perfecto regalo navideño, ya que le hará compañía al agasajado y por lo general suele ser una sorpresa; a mi suegra le pasó, una compañera de trabajo le dio en el intercambio un poodle. Mi suegra, que tiene la costumbre de deshacerse de los gatos de su hija, ha conservado a la Lu, porque su esposo e hija se han encariñado con ella y no se quiere meter en líos.
Desafortunadamente, muchos perros no tienen esa suerte y al pasar reyes y cuando la persona se da cuenta de que comen, hacen del baño y como son cachorritos son muy traviesos; los pone de patitas en la calle; otros se esperan un poco más y cuando llegan las vacaciones de semana santa, los echan a la calle para poder irse a vacacionar sin preocupaciones, lo mismo sucede en verano, cuando se añade otro curioso fenómeno: algunas familias no podrán cambiar auto pero qué tal cambian mascota...
Total, en estas fechas los vendeperros abundan y las tiendas están retacadas de cachorros, de los cuales uno de cada 10 logrará llegar a un buen hogar.
Nunca regalen un animalito de manera sorpresiva y aun si saben que la persona lo ansía y está preparada para él, esperen a que pasen las fiestas, las reuniones y los cuetes, eventos muy traumáticos para ellos y especialmente, adopten, no compren.
miércoles, 14 de diciembre de 2011
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4 comentarios:
Si yo quisiera tener una mascota, adopto. Pero la verdad, tener mascota es como tener hijo y no quiero ni uno ni lo otro.
Es perfectamente válida tu postura, el problema es cuando alguien bien intencionado decide que necesitas ese extra en la vida y te enjaretan una mascota, a mi suegra le pasó así.
Creo que soy lo suficiente seco como para que la gente entienda que bien puedo decirles que no quiero su regalo y negarme a recivirlo.
Perdon, esta respuesta va en el post del día anterior.
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