martes, 18 de octubre de 2011

Burnout parte 4

Los tipos de Burnout

Antes, esta situación se encontraba en médicos, profesores de grados intermedios, telefonistas (cuando una central telefónica operaba a la antigüita) y en general, en personas que tenían que atender al público y soportar situaciones de crisis. Actualmente es un problema muy difundido.

Burnout Altruista
Se comenzó a ver en los 70’s, con jóvenes idealistas que trataban de hacer del mundo un lugar mejor, se iban a trabajar a kibutz o a cómunas o a salvar a las ballenas; algunos de ellos, elegían causas imposibles y con el tiempo, se desilusionaban y comenzaban a sobrecompensar, hasta que llegaba el colapso nervioso.

Burnout por compensación
Quizás la persona fue el niño ejemplar, o el que nunca hacía nada bueno o quizas acaba de romper una relación sentimental; ahora la persona se encuentra en un lugar seguro, su trabajo, y es todo lo que tiene para demostrar lo que tenga que demostrar (se), es más fácil salir del tercer caso que de los dos primeros, ya que estos requieren terapia.

Burnout social
Tienes el trabajo que te gusta, donde siempre querías y eres la envidia de todos, aunque detrás de esa brillante apariencia hayan largas horas de tensión, competencia nada sana e inhumanas horas de trabajo. Serías muy tonto si dejaras un trabajo como ese ¿verdad?

Burnout por explotación
Eres afortunado al tener ese trabajo, mira como está la crisis, si a ti no te gusta, hay 10 personas que hasta cobrarían menos que tú; una situación de este tipo es como tener un marido maltratador, después de un tiempo comienzas a pensar que te lo mereces y que si pierdes ese empleo, no podrás conseguir otro más. Tiene una variante, aún más enferma, eres el o la mejor emplead@, sin ti, la oficina se caería, por eso es que confían tanto en ti, por que saben que siempre estarás ahí y de esa manera, sin darte cuenta, acabas quedándote sin vida social y dejando tu vida en la línea por los que te hacen creer que eres indispensable. Desde luego es más fácil librarse del primero que del último, después de todo nadie rechaza unas palmaditas en el ego.

2 comentarios:

Hluot Firthunands dijo...

Jejejejejeeeee

La última vez que busqué mejores condiciones de trabajo alguien me salió con que era afortunado por tener trabajo y le contesté que buscara a alguien que hiciera lo que yo.

Dos meses despues nos dieron mejores prestaciones laborales y extendieron las mejoras a departamentos que no pidieron nada.

Estoy de acuerdo en que existen quienes quieren ser capataces, pero se necesita tener madera de exclavo para que esto funcione.

En todo caso, nosotros tuvimos la ventaje de estar hiper-especializados al grado de que no encuentras gente que nos reemplace en menos de 6 meses.

Kishiria dijo...

Lo dificil es que todos se unan y nadie ceda... Y tener los peles de la gata en la mano

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