viernes, 18 de septiembre de 2009

La pasmosa celeridad de la justicia Mexicana

El caso de Jacinta Francisco Marcial es uno de esoa casos en que una persona se encuentra en el peor lugar en el momento equivocado, la indígena de origen Otomí que habla muy poco español, se encontraba cuidando su puesto de aguas frescas en el tianguis de Santiago Mexquititlán, cuando acudieron los integrantes de la AFI para hacer un decomiso, que en poco tiempo se convirtió en un enfrentamiento, Jacinta, quien pasó por ahí atraída por la multitud y permaneció ahí unos minutos, tiempo suficiente para que un fotografo del diario Noticias de Querétaro sacara una foto en la que ella aparecía, misma que sería usada por las autoridades como unica prueba para acusarla de Secuestro y llevarla con engaños a la policía, donde fue arrestada, exhibida y sentenciada a 21 años de prisión y al pago de una multa de más de 90 mil pesos.

La atención de los medios y las diversas asociaciones se centró sobre Jacinta, quien finalmente, tras 3 años de prisión ha sido liberada, ¿su delito? ser mujer, indígena y pobre.

2 comentarios:

Hluot Firthunands dijo...

Y lo peor, acusan a ella y a dos indigenas mas de secuestrar a 6 agentes de la AFI.

Sin entrenamiento, sin armamento, sin equipo de comunicaciones y sin complices, secuestran a 6 de la AFI. En serio que da verguenza el supuesto entrenamiento de la disque agencia.

Lo que yo quisiera el es nombre y la direccion del jijo de su mal dormir "juez" que las condeno. Me cae que voy a hasta Queretaro a tirarle huevos podridos a su casa.

Kishiria dijo...

tienes razon...

yo no le tiraría huevos podridos le tiraría los huevos podridos que tiene en ... tú me entiendes.

que situacion tan triste y al igual que ella, hay gente en la carcel que ya tiene años y todavia no se les dicta sentencia.

quede como moraleja, no hay que acercarse por curiosidad a las muchedumbres y mucho menos dejar que le tomen fotos a uno.

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